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71 o cómo el cine de acción puede explorar aún nuevas sendas


Los invito a que conozcan la versión en youtube


El cine de acción tiene un problema muy grande y es que el espectador no espera absolutamente nada cuando se sienta a ver una película de este género. Al hablar de este tipo películas, de inmediato, el juicio se relaja y se acepta cualquier ridiculez que presente la pantalla. Por eso es refrescante cuando uno se encuentra con películas que no se limitan a emplear la formula fácil y exploran otras posibilidades. En este caso la película que queremos explorar e invitar a conozcan es 71, una película del 2014, dirigida por Yann Demange.


Pero antes de abordar lo que hace llamativa la película del director Demange, observemos cuales son los caminos recurrentes que hace que el cine de acción sea considerado como una propuesta pobre, para nadie es un secreto que el cine de acción es como unas palomitas de maíz, están bien, son ricas, pero no alimentan y peor aún comer en exceso puede traer serios problemas.

El problema del cine de acción.



Criticar el cine de acción es como golpear un invalido, ni se disfruta ni produce orgullo, no hay merito en hacerlo, porque el cine de acción es un cine creado mediocremente, un cine para consumir, y ya sabemos qué es lo que pasa con lo que se produce en masa, simplemente pierde calidad.


En esa línea Podemos decir que son tres Los factores que llevan a este tipo de cine a convertirse en una propuesta fácil para el espectador:


Numero uno Personajes mediocres. El trabajo de creación de personajes es pobre, personajes con roles morales definidos: existe el bueno, (un tipo supremamente aburrido, generalmente atractivo entrenado y con dinero) que lo soporta todo y el malo que quiere todo. La tarea del bueno es detener al malo para al final quedarse con el interés amoroso del protagonista. La ausencia de personajes complejos en esta clase de películas hacen que uno sepa con exactitud cómo va a terminar el largometraje con los cinco primeros minutos de cinta.


En segundo lugar, una narrativa básica y lineal. dos horas de película se pueden resumir de esta manera: un sujeto que comprendemos que es bueno, muy bueno, tiene un conflicto con el sujeto que nos presentan como el malo, muy malo, al principio el protagonista pierde por un momento (con esto se busca generar una tensión artificial y falsa), pero luego se recupera y logra vencer a esa encarnación del mal. Esta trama, cabe aclarar, es adornada con explosiones, mujeres bonitas y secuencias de acción increíbles. En una narrativa como la anterior, no exige nada al espectador y peor aún uno puede dormir durante la película y al salir de la sala se tiene la sensación de que se comprendió a totalidad todo lo que pasaba en la cinta.


En tercer lugar, existe una imposibilidad de empatizar con el protagonista, ante los grandes héroes de la pantalla, uno puede sentir, respeto, admiración o terror, pero jamás empatía porque para tener este sentimiento el espectador debe sentir que es posible que lo que le pasa al protagonista le puede pasar al espectador, pero si el protagonista tiene todo ganado desde el principio, sus tensiones se sienten falsas y el espectador asume que solo va a ver, otra vez, la historia de una victoria más de un héroe genérico . Incluso la misma apariencia física del héroe, (hombre típico canon de belleza) aleja al espectador, pocas veces en pantalla, el héroe es un hombre promedio, lejos de los cánones que rigen los estereotipos de belleza.


Es imposible empatizar con el héroe de las películas porque existe una barrera que establece claramente que lo que le pasa en la pantalla al protagonista es privilegio de almas elegidas, no el destino de hombres promedio.


Para concluir esta primera parte podemos decir que


Puede que existan más factores que hacen del cine de acción un desastre que vende bien, pero Al sobre explotar estos elementos el espectador no logra compenetrarse con la historia, la trama se siente lejana, y por esta razón los lazos emotivos con la historia son nulos. Si bien uno puede admirar los efectos, las coreografías, no basta solo tener buenos adornos para construir buenas historias, el cine de acción contemporáneo se parece a un rico plato de comida que no sabe a nada. La forma no es lo único que importa en una obra artística, para que una obra ofrezca algo más, forma y fondo deben mezclar, efectos e historia son claves para crear buenas películas.


Si vemos que el cine de acción no ofrece propuestas diferentes cabría preguntarnos ¿Qué hace de 71 una propuesta refrescante para el género? Esta interrogante vamos a responderlo en el siguiente apartado..


Capítulo 2

71 una película que no cae en los caminos fáciles de las películas de acción.




Antes de hablar de la película hagamos un pequeño resumen (libre de spoilers) para analizar porque esta cinta se sale de la línea común


El resumen es muy sencillo


El soldado Gary Hook por cuestiones del servicio, se pierde en un Belfast, un barrio Hostil donde facciones del IRA chocan constantemente con el ejercito, en esta situación debe hacer lo posible por sobrevivir, en una noche mientras su unidad logra rescatarlo.

Cualquiera pensaría con esta reseña que lo están engañando, una reseña tan simple solo refleja una película del promedio sin embargo, La virtud de la71 , es que desde el principio se siente incertidumbre por el personaje, en ningún momento el espectador tiene tener claro como se va a desenvolver la suerte del protagonista esto se da por el potente contexto de la historia.


¿Cuál es contexto?


la historia se ambienta en los años setenta en el conflicto entre el IRA y el ejercito en Irlanda del norte (solo este marco le da verosimilitud a la trama), a raíz de este conflicto los soldados deben evitar motines, localizar grupos rebeldes de y ubicar posibles terroristas. El trabajo con este argumento hace a los personajes más humanos para espectador, el protagonista parece más real, se hace de carne y hueso: un soldado al que por robarle sus armas, grupos terroristas logran separarlo de su unidad, desde ese momento el objetivo, para el protagonista, consistirá en no ser asesinado en las peligrosas calles de Belfast.

con agradable sorpresa nos encontramos que 71 rompe con las líneas fáciles de otras películas del genero, estas líneas son las siguientes:


Número 1 El protagonista no es alguien especial. En esta historia no existe un elegido, a pesar de recibir entrenamiento militar, Gary hook no es un hombre que puede encargarse de 100 o 200 sujetos con una sola mano. Su entrenamiento no es suficiente para la situación. En este caso puntual vemos a un hombre frágil, que teme por lo que le acontece a cada paso, de ahí que sus reacciones sean más naturales, un hombre que teme, que no tiene claro que hacer o cómo actuar, un hombre que huye cuando puede.


Numero 2 no existen buenos ni malos. El acierto más grande de la película consiste en crear personajes complejos, personajes no comprometidos con una postura ética definida, sino personajes que reaccionan ante las situaciones del contexto y solo intentan sobrevivir. A diferencia de otras cintas donde todo es blanco y negro, incluso en la apuesta estética, en esta película el terreno gris es el que predomina: en las actitudes de los personajes, en la ciudad, en la ropa, etc.


Con solo emplear estos dos elementos, la película sale del promedio y mantiene al espectador enganchado con los sucesos de la cinta. Básicamente en el film se emplean bien los dos elementos que Aristóteles considera básicos para que el espectador pueda generar empatía con una obra: el temor y la compasión.


En esta obra Sentimos temor por los sucesos que le acontecen a Gary y por los riesgos que debe asumir en una situación tan peligrosa. Esto a la vez nos lleva a sentir compasión por el protagonista, sentir las venturas y desventuras, como propias, en los 90 minutos de cinta sufrimos con lo que el protagonista sufre

Asé se crea un vínculo estrecho con la obra que nos permite ver algo más que mujeres bonitas, puños, patadas y explosiones.


En conclusión.


Cintas así demuestran que un género del que no se espera nada aún puede brindar propuestas que permiten que el espectador experimente otras sensaciones frente al tema de la acción.


La recomendación de esta película se da porque, aparte de los elementos mencionados, su forma de tratar la violencia es diferente; en toda película de acción la violencia se siente como un juego, el bueno solo debe ensuciarse un poco para lograr sus objetivos y derrotar al malo del día, luego de esto el mundo es un lugar mejor. En cambio, en 71 nos encontramos con una violencia real, desgarradora, el director no infantiliza al espectador mostrándole un mundo simple, definido y claro, su propuesta consiste en mostrar como la violencia desfigura a los hombres, como la violencia apaga los espíritus. Al final de la película un sabor desagradable recorrerá la boca porque con la película comprendemos que nadie es tan bueno como se cree ni tan malo como quisiéramos que fuera.

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